Maria Karla Perez

 

La poesía es el modo más efectivo que ha encontrado para expresar sus cuestionamientos en relación con la naturaleza humana y sus sentimientos sobre el mundo. A través de ella, puede explorar su condición de individuo en una realidad profundamente compleja y alienante, pero también lo que comparte con los otros, el dolor inherente a la existencia, y los miedos propios y colectivos. El proceso de escritura le da espacio para diseccionar sus procesos internos y hacer catarsis.
La fotografía, por su parte, es la expresión de su percepción de la realidad en términos visuales. No suelo construir las imágenes de manera artificial, sino desautomatizar su experiencia visual, producir a partir de lo que ya está ahí, transformarlo en algo diferente a través del propio acto fotográfico. Mi trabajo siempre ha sido muy variado en tema y estilo, pero elementos como la segmentación y la recontextualización de las formas están bastante presentes. Más que trabajar con conceptos específicos, le interesa transmitir estados de ánimo y generar una experiencia estética interesante.
Para ambas formas artísticas, se trata de un proceso bastante instintivo. En el caso de la poesía, funciona por estímulos que conectan directamente con su sensibilidad poética. En el caso de la fotografía, basta con conocer un espacio, cuerpo u objeto para que las imágenes se proyecten en su cabeza. Tras ese estímulo inicial, todo cuanto queda es la ejecución: escribir el poema o tomar la foto.

Maria hace su residencia en Can Serrat durante el mes de Junio de 2022